martes 29 de octubre de 2019
Pasaron tres meses y el femicida de Esther Gutiérrez sigue prófugo
El 23 de agosto Esther Gutiérrez de 52 años, como otro ciento de mujeres este año, murió en manos de Gustavo Gramajo su pareja. Este hombre de 51 años ya había estado preso durante nueve años por abuso de una menos de 13. La justicia lo liberó y regresó a la casa de Esther diciendo que había cambiado.
En comunicación con FM La Uni, Fernanda Ludueña integrante de la Defensoría de Géneros e Infancias de Zona Norte retomó el caso y aseguró que la justicia no está haciendo nada ni por Esther ni por su familia. “Él le decía que la mujer es un vaso frágil”, contó Ludueña quién acompaña a sus hijos que exigen justicia por su mamá. “Con el tiempo empezó a ser el monstruo de siempre. Le hacía comer paquetes de cigarrillo, la mordía, la golpeaba. Todo lo que hace un violento” relató Fernanda. Esther termina con el cráneo aplastado. Gramajo la desfigura y la asfixia hasta matarla.
Desde este día el femicida está prófugo. Gramajo tiene pedido de captura y la causa es llevada adelante por la Unidad Funcional de Instrucción (UF) número 7, del Departamento Judicial de San Martín. Su familia y vecinos saben que está en el barrio pero no hay respuesta judicial al respecto.
“Sabemos que hay una complicidad de la familia. Sabemos que cuando el femicida comente el hecho llamó a su hija. Sin embargo, la fiscal jamás la citó”, cuenta Ludueña a la radio. Además, asegura que desde la fiscalía no saben cómo tratar a los familiares y sólo les informan que no pueden hacer más nada.
Desde las organizaciones y la Defensoría acompañan el pedido de justicia. Ya se realizaron dos movilizaciones a la fiscalía y aún siguen sin respuestas. La semana pasada salieron por el barrio a realizar pegatinas de carteles con la cara de Gramajo. Por voluntad se intenta visibilizar el caso e impedir que un femicida violador continue en libertad.
